La planificación familiar surgió a los años 80 como una forma más de independencia de la mujer moderna: una mujer que trabaja y que puede decidir cuando quiere tener sus hijos y formar una familia. La planificación familiar es, así, una técnica que consiste en varios métodos anticonceptivos, tanto por la mujer como por el hombre, y a menudo es algo necesario en la vida sexual y de pareja.
Para hablar de este tema contamos con Maria Ferrero, presidenta de la Asociación de Planificación Familiar de Cataluña y las Islas Baleares. Esta es una asociación que desde el 1982 está luchando para fomentar la sensibilización, la prevención y la educación de la sociedad en el ámbito de la salud sexual y reproductiva.
¿Por qué consideráis que es importante la planificación familiar?
Porque es el derecho que tienen todas las personas a poder disfrutar de una sexualidad satisfactoria y desatarla de una familia y de unos hijos que tú tienes que decidir cuando y en que momento quieres tener. Así la planificación familiar fue el gran cambio que hubo el siglo pasado de poder desatar la sexualidad de la reproducción. Esto ya se reconoció dentro de los derechos sexuales y reproductivos, que están ligados a los derechos humanos.
¿Se basa en el control de la natalidad a través de los anticonceptivos, o también en la reproducción asistida, que permiten tener o ampliar la familia?
Es un todo. No es “yo no quiero tener hijos”, es yo quiero formar una familia con otra persona, o yo sola o directamente no quiero formarla. O sea es el derecho que tenemos todas las personas a organizar nuestra vida y, a ser posible, en el momento que nosotros queramos planificarla. Es yo decido cuando puedo y cuando quiero montar o hacer esta familia, y como la quiero hacer.
¿En qué momento apareció la planificación familiar, como técnica de control de la maternidad y la natalidad?
Surgió aproximadamente a la década de los 80. Hicieron una recopilación de todos los métodos anticonceptivos que se habían utilizado a lo largo de la historia. Y es que ya los egipcios ya traían condones hechos con diferentes partes de los intestinos de los animales e incluso existían unos hechos como de “ganchillo”. Es decir, que ya desde que el ser humano es ser humano ya ha intentado organizar su vida y organizar su maternidad o paternidad. Por lo tanto, ya los egipcios pusieron las bases de lo que es la anticoncepción moderna del siglo XX, cuando se creó toda la anticoncepción hormonal, lo DICE, y todas las técnicas de la reproducción asistida.
Y hablando de los métodos anticonceptivos, ¿se puede considerar como método anticonceptivo el hecho de no tener relaciones sexuales durante la época fértil?
Todos el métodos anticonceptivos se tienen que ofrecer, se tienen que dar a conocer y se tienen que explicar por parte de los sanitarios. Generalmente los métodos naturales, como seria este o medir la temperatura de la mujer, o controlar el flujo… los sanitarios los explican pero muchas veces se engloban más dentro de las técnicas para quedarse embarazada, que no para evitarlo. Y es que las mujeres no somos un reloj, por eso tenemos que conocer muy bien nuestro cuerpo para saber cuando empezamos a ovular y cuando podemos mantener relaciones sin necesidad de usar otro método anticonceptivo. Esto implica un mes de control, para saber como funciona tu cuerpo durante 30 días. Porque hay un abanico muy amplio de días que te puedes quedar embarazada. Esto no quiere decir que si tú conoces bien tu cuerpo, y quieres utilizar un método más natural de este tipo, no puedas hacerlo.
¿Y cree que la planificación familiar es una cuestión que todavía se ve sólo de las mujeres, las cuales tienen que cuidar su cuerpo para no quedarse embarazadas, o es un tema común en una pareja?
Yo pienso que todavía hay un sector de la sociedad que deja estas decisiones en manso de las mujeres. Pero pienso que hay un montón de hombres que se están implicando dentro de las decisiones de tener o no tener hijos y qué método pueden usar. Porque a veces hay métodos, como el condón, que quizás no es cómodo por la pareja, y pueden hablarlo entre los dos y decidir usar otro. Así, yo cada vez encuentro más parejas donde el hombre es quien decide en este aspecto o el que trae el control de la natalidad de la pareja.
Por lo que hace al tema de los anticonceptivos, se acostumbra a usar el condón para prevenir embarazos pero básicamente para prevenir enfermedades de transmisión sexual.
La semana pasada hicimos una entrevista a María Milagros, del centro Duoda, un centro que se dedica a la investigación, y ella destacaba que el mundo laboral está planteado en favor de los hombres y que no contempla, y de hecho desprecia, la natalidad y la maternidad. ¿Usted estaría de acuerdo con este planteamiento?
Si, básicamente las mujeres continuamos en el mundo laboral y se nos penaliza por el hecho de poder ser madres. Entonces esta podría ser una de las causas de la planificación familiar y de que las mujeres cada vez más estén planteándose una maternidad en la década de los 30 o a finales de los 30, que no a los 20, que era el que pasaba en el siglo pasado. Esto sucede porque si estás haciendo tu vida laboral, quedarse embarazada puede suponer una frenada importante y llegar a olvidar tus objetivos profesionales.
De hecho, hace poco escuché las palabras de una empresaria que dijo que ella no contrataría a una mujer de los 25 a los 40 años, precisamente por la capacidad de quedarse embarazada que tiene. Por lo tanto de alguna manera se está penalizado la maternidad.
Por lo tanto ¿cuál sería la solución ante esta concepción de la maternidad como un problema?
Yo pienso que sería tan sencillo como que muchos trabajos que muchas veces hacen permanencias, donde se hace realmente trabajo sino que sólo tienes que estar allá, y que tampoco se entiende demasiado por qué. Entonces, en base a un horario, a todas las mujeres que tengan trabajos así y niños pequeños, tendrían que permitirlos poder llevar a cabo una planificación familiar de verdad.
Por otro lado hay a veces que si la mujer quiere dedicarse a la vida familiar se descuelga de la vida laboral. En cambio hay países que tienen una media jornada que se complementa con otra persona, sin perjudicar al empresario, donde tú puedes continuar disfrutando de tu familia y organizarla, y al mismo tiempo continuar estando a la empresa pienso que hay muchas cosas que si queremos pueden llevarse a cabo. Hay mucho más para poder hacer esta conciliación y que las mujeres no tengan esta disyuntiva de, por una parte, querer ser madres pero se me castiga para ser madre. Y por otra parte queremos ser trabajadoras, pero nos castigan si queremos ser trabajadoras y dejan de lado esta maternidad. Por lo tanto sin castiga tanto si hacemos una cosa como si hagamos otra. Porque después hay este discurso de que la natalidad va bajando…
Porque, de hecho, tampoco se ponen facilidades… ¿no?
Está claro, hace falta que nos pongan herramientas, como guarderías, horarios, alcance económico, comedores… Muchas cosas. Porque yo pueda continuar desarrollando mi vida laboral y desarrollar mi vida familiar y no tener que decidir.
Link programa: http://www.ivoox.com/amb-veu-dona-16-juny-2015-audios-mp3_rf_4660962_1.html
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